membranapvc

En otros artículos de este blog hemos comentado los diferentes métodos que existen para impermeabilización de cubiertas, sobre todo en terrazas. Entre las más utilizadas podemos citar:

  • Impermeabilización de plomo.
  • Impermeabilización de lámina asfáltica.
  • Impermeabilización de caucho
  • Impermeabilización con láminas de EPDM.
  • Impermeabilización de policloruro de vinilo (PVC).

En concreto, vamos a fijarnos en estas dos últimas.

La impermeabilización con membranas de PVC se emplea como barrera para cubiertas de todo tipo, ya sean muros de obra civil, tejados, terrazas, túneles, lagos ornamentales, piscinas, campos de golf o hasta obra hidráulica pequeña, como en el revestimiento de depósitos de agua metálicos. Ofrece una enorme variedad de espesores y colores, para que no se resienta el factor estético y el acabado sea perfecto.

La soldadura, que se realiza por aire caliente, puede ser manual o automática, aunque en cualquiera de los dos casos se trata de un proceso sencillo y rápido, que requiere unos conocimientos mínimos pero que no obliga al operario a contar con una amplia experiencia, como en el caso de otro tipo de soldaduras y materiales. La comodidad también es amplia. En el caso de la soldadura con máquina automática, hay máquinas en el mercado que permiten unir láminas a un ritmo de 12 metros de superficie por minuto. Los resultados son siempre excelentes y muy duraderos en el tiempo, incluso a la intemperie.

Ventajas de las láminas de PVC:

  • Alta flexibilidad.
  • Impermeabilidad máxima.
  • Puede fabricarse con protección ultravioleta si la lámina va a estar expuesta a sol.
  • Resistencia a la intemperie.
  • Buena soldabilidad.
  • Es un material autoextinguible.

La impermeabilización con membranas de PVC es una gran solución. En comparación con las láminas EPDM, un material de caucho muy elástico, no requieren demasiado tiempo para su instalación. Con éstas, los fabricantes recomiendan su protección con algún tipo de pavimento, sobre todo en superficies que vayan a ser muy transitadas. Su instalación requiere de profesionales especializados. Aunque las láminas de EPDM soportan agentes meteorológicos y ofrecen la posibilidad de colocarse a medida, se trata de una solución más costosa, que puede no compensar cuando las superficies son pequeñas. Su instalación requiere el levantamiento y trasiego de material, algo que no ocurre con las membranas de PVC.

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