Las láminas de policloruro de vinilo reforzado, o PVC reforzado, son lonas plásticas que se fabrican utilizando dos láminas de PVC entre las que se encaja un refuerzo interior de fibra de poliéster. Con esto se consiguen láminas, con un peso de 400 gr/m², muy resistentes y versátiles.

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Sus aplicaciones son numerosas como impermeabilizante de máximas garantías; túneles, cubiertas de invernadero, garajes, cobertizos, terrazas, toldos cortavientos, porches, cortinas en lavaderos de automóviles, naves industriales, domos geodésicos, etc.

En ellas se pueden utilizar ollados para cortinas y tauliner de camiones. Se puede suspender en el aire, también, con grapas triangulares deslizantes. Otro accesorio corriente con el que se emplean son los tensores multiusos, elásticos y sencillos de colocar.

¿Qué ventajas ofrece?

  • Es material con muy buena impermeabilidad, idóneo para permanecer a la intemperie o en contacto con materiales agresivos.
  • Soporta el efecto de los rayos ultravioleta (UV) del sol.
  • Aguanta bien los cambios de temperatura repentinos.
  • Es un material soldable por calor, lo que supone una ventaja por la sencillez, limpieza, bajo coste y durabilidad de las uniones.
  • Es transparente, aunque pude adoptar diferentes coloraciones, lo que hace que estéticamente resulte adecuado para instalaciones a la vista, expositores publicitarios y otros.
  • Impide la inversión térmica, lo que hace que, en invernaderos, siempre haya una temperatura interior superior a la que se da en el exterior.
  • Las láminas de PVC reforzado se pueden colocar en casi todo tipo de suelos, desde superficies de cementos hasta gresite..

Lamina-Pvc-Reforzada

Instalación

En el ámbito doméstico, la mayoría de las instalaciones que se van a realizar de malla de PVC reforzada van a ser en piscinas. Ésta asegura la estanqueidad del vaso y una imagen funcional y de estética perfecta.

La unión entre las láminas se realizan mediante soldadura por calor, de forma que unas láminas se solapan con otras. Diferenciamos seis etapas en el proceso:

  1. Saneamiento del interior de su piscina reparando las zonas degradadas en el interior del vaso. .
  2. Preparación del circuito hidráulico sustituyendo accesorios como boquillas, rebosaderos, focos y otros. .
  3. Colocación del perfil de sujeción en el perímetro de la piscina. .
  4. Instalación, a medida, de la lámina reforzada de PVC. En las escaleras debe utilizarse el mismo material. .
  5. Llenado de la piscina.  Como el sellado es inmediato, no hay que esperar..

Lamina-En-Piscina

Consejos de transporte

La vida útil de la lámina de PVC reforzada es larga, lo que no quiere decir que no haya que cuidar el material, en especial durante su transporte e instalación. En primer lugar, es imprescindible colocar el material siempre sobre una superficie lisa, sin salientes, puntas, gravilla, etc… Evitar el arrastre de las bobinas puede también evitarnos ralladuras o, incluso, roturas.

También hay que prestar atención especial para no colocar encima de las láminas objetos punzantes, herramientas u otros de gran peso. Si se decide blanquear el plástico, hay que evitar que se dañe con productos de carácter abrasivo.

Tampoco conviene efectuar la instalación en las horas de más calor para evitar distensiones. Es habitual que el producto se comercialice y distribuya protegido por otro material, como malla antihierba y otros.

 

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